lunes, 23 de mayo de 2016

Crítica del Episodio III: La Venganza de los Sith

Aconsejo que antes de seguir con la lectura visitéis la crítica previa del Episodio I: La Amenaza Fantasma, pues hay una introducción para aclarar el contexto de esta trilogía que determino en gran medida el desarrollo de la misma. También es interesante leerse la crítica del Episodio II: El Ataque de los Clones pues mucho de lo expuesto en esa crítica es también valido para este episodio.


Historia
Aquellos que poseáis un conocimiento medianamente exhaustivo de la historia cinematográfica asociada a la saga, o si no es el caso podéis leerlo en las críticas ya mencionadas, sabéis que el origen de esta trilogía se basa en 3 premisas: 
  • Qué son las guerras Clon.
  • La caída de Anakin Skywalker en el Lado Oscuro y el nacimiento de Darth Vader.
  • La relación entre Vader y su maestro Obi-Wan Kenobi y el enfrentamiento entre ambos.
Estas 3 ideas provienen del dialogo entre Ben Kenobi y Luke Skywalker en el episodio IV, cuando Luke pregunta sobre su padre. Y las 3 ideas, aunque ligeramente desarrolladas previamente, donde realmente son tratadas en todo su esplendor es en este episodio III, por lo que no es de extrañar que sea muy superior a los 2 episodios previos.


Si la primera película era un producto para un público infantil y para enganchar a una nueva generación de aficionados, y el Episodio II una película romántica con el fin de ampliar el público objetivo; el Episodio III deja ya los experimentos y cuenta lo que los aficionados estaban deseando, el nacimiento del Imperio y Darth Vader. Así que tenemos una película mejor en todos los aspectos, con mejor ritmo y mejor historia. Una película donde se amontonan momentos de gran importancia en la saga galáctica, es imposible aburrirse ya que es una sucesión continua de eventos cada vez más impactantes hasta un final apoteósico que engancha de manera solvente con la trilogía clásica.

Dirección
Bien sea por que esta era la película que en verdad quería contar, siendo las 2 previas básicamente cultivos de merchandising y nuevos avances en efectos digitales cinematográficos. O bien porque ha vuelto a pillar el ritmo y la calidad que tuvo en el pasado, tras 2 películas de calentamiento, en esta es donde vemos a George Lucas como el director que fue en el pasado; y se nota en un mejor ritmo y esa sensación de “gran aventura” que tenía la trilogía clásica y que en los episodios I y II esta como apagada. Todo está mejor rodado, el estilo de Lucas de “más rápido y con más intensidad” aquí se cumple a rajatabla, una sucesión imparable de planetas, razas y tecnología; enganchando de gran manera todo lo generado en esta trilogía con lo visto en la trilogía clásica.

O lo tenía planeado desde el principio o por la propia evolución de la trilogía tenemos un primer episodio luminoso y optimista; un segundo episodio otoñal de transición que trasmite la sensación de fin de una era para culminar con un episodio III crepuscular, cada vez más frío y oscuro durante el desarrollo de la trama que culmina en ese temible Imperio que rezuma maldad y terror tecnológico. Haya sido bien por designios del director, el azar o por la continua exigencia del público por una trama menos light; la evolución mencionada es uno de los grandes aciertos de esta trilogía y juega muy a favor de este último episodio.

Para finalizar el apartado de dirección destacar que, en esta película, Lucas conto con un ayudante de dirección de lujo, Steven Spielberg. Spielberg, gran amigo de Lucas, se encontraba en aquel momento sin ningún proyecto propio considerable, así que Lucas le invito a rodar algunas secuencias de la película, en concreto parte del rescate del canciller y toda la secuencia del aterrizaje de emergencia de la nave separatista en Coruscant. Es en dicha parte donde se nota bastante la mano de Spielberg especialmente en esos planos que van desde el exterior del vehículo al interior de la cabina donde están los héroes, estilo de secuencia que a Spielberg le encanta y usa siempre en sus películas.


Interpretaciones
Las mejores interpretaciones de los protagonistas de la trilogía, están en este episodio. Sin ser papeles que puedan dar para un óscar, en esta ocasión los diálogos son mejores, más concretos, sin giros excesivos e innecesarios; cuentan lo que tienen que contar y ninguno da la sensación de sobrar, todos tienen su razón de ser.

Ewan McGregor hace su mejor Obi-Wan, tiene ya domado al personaje y ha sabido hacerlo suyo añadiendo algunos detalles de la interpretación de Alex Guinness, que sirven de puente con el personaje en el episodio IV y que dan sensación de conjunto, lo cual se agradece.

Natalie Portman ve su personaje reducido al mínimo, pues su finalidad en este episodio es pasar de ser partícipe de la trama a convertirse en la trama; el objetivo de la película es salvarla de la muerte a ella y su hijo nonato. Su función en la película, ser la madre de los mellizos y eje conductor no da margen para poder interpretar mucho, ni disponer de tiempo suficiente ante la cámara. Aun así, destacar su conmovedora escena intentando que Anakin abandone el Lado Oscuro, justo antes del duelo final, toda esa secuencia está realmente bien interpretada por ambos actores, y con una química que hubiera hecho falta en el episodio II.

Hayden Christensen es en esta película donde convence más como Anakin y futuro Darth Vader. El primer paso fue cambiar la caracterización del personaje, cosa necesaria para ser creíble su paso al icónico aspecto del Lord Oscuro del Sith. Vader en la trilogía clásica fue interpretado a nivel físico por David Prowse, un campeón de halterofilia de una envergadura y altura considerable. Christensen es alto, aunque no suficiente, y su constitución es delgada así que hizo un notable esfuerzo físico y un estricto régimen para ganar 18 kilos de masa corporal, lo cual consigue que Anakin se vea bastante imponente. También un acierto el pelo largo y las cicatrices del rostro, dejando claro su estatus de héroe de guerra y curtido guerrero y una vez pasado al Lado Oscuro ayudan a hacer su rostro perturbador gracias a una actuación de Hayden que muestra a alguien que ha sucumbido al Lado Oscuro y justifica el mal realizado pensando en que hace lo correcto. A su vez en pequeños gesto, muy similares a tic de alguien que se encuentra en una situación en la que no sabe muy bien si llorar o reír, da la impresión de que el mismo sabe que se está auto engañando. Este detalle es un interesante contraste con el Emperador un ser claramente maligno y sin dudas en sus acciones.


Destacar también una mayor y mejor química entre los personajes de Anakin y Obi-Wan, que a parte de una relación maestro-aprendiz ya pasada y afectuosa, mantienen una relación fraternal muy acorde con la que suelen desarrollar los soldados tras numerosas batallas. Esta relación se siente más real para dichos personajes que la relación paterno filial que tenían en el episodio II, no tan creíble por el cinismo y humor que caracteriza a Obi-Wan y la poca diferencia de edad entre ambos personajes. Queda mejor esta relación de hermano mayor y hermano menor, entremezclada con una relación de camaradas de armas tras numerosas batallas en las guerras clon.

B.S.O
Estamos ante la que considero la mejor banda sonora de esta nueva trilogía. Ritmos orquestales más oscuros, lentos cuando son necesarios y épicos en la batalla. Se reaprovecha lo mejor de los episodios I y II, y se añaden temas muy superiores. El tema principal “Battle of the Heroes” me parece de lo mejorcito de toda la saga galáctica, acompañando al duelo final de una forma genial, que además por momentos se intercala con el tema del episodio I “Duel of the Fates” y el otro gran duelo en la parte final de la película.

No es exagerado decir que musicalmente toda la parte final, desde el duelo, pasando por el nacimiento de los gemelos y Vader, y concluyendo con la entrega de Luke a sus tíos bajo los soles gemelos de Tatooine; no solo a nivel cinematográfico, sino especialmente a nivel musical se encuentra a uno de los niveles más alto de la saga.

Pero, como he dicho, toda la película consta de grandes momentos donde Williams ha estado a su mejor nivel, la escena inicial con los cazas volando en la batalla sobre Coruscant, la música durante toda la escena de la ópera, o la escena en que Anakin sufre pensando en Padme antes de decidirse a ir al senado donde los Jedis se dirigen a detener a Palpatine.


FX
El uso del rodaje digital, que en el episodio II en mi opinión estaba muy verde y poco pulido, en este episodio III ya si se nota más dominado y mejorado, y aunque sigue teniendo los defectos innatos de dicha tecnología como perdida de nitidez y definición sobre todo en los actores reales. Aquí es mucho menor, todo está mejor perfilado, los fondos y lo actores están mejor integrados, el colorido excesivo y casi plástico que tenía el episodio anterior aquí da lugar a una textura más realista y un tono más adecuado.

Sigo prefiriendo la calidad que da el fotograma y el rodaje más tradicional; pero este episodio III si demuestra una calidad visual aceptable que junto a las ventajas tecnológicas que implica el rodaje digital, lo hace una opción muy interesante y viable para el futuro.

Por lo demás, los efectos especiales alcanzan en este episodio las cotas más altas en toda esta trilogía, ya sean efectos clásicos que por supuesto hay; pero sobretodo los efectos digitales y CGI, pues al ser el episodio con más acción y más aventura es también el más ambicioso de todos.

Grandísimo trabajo de maquillaje en esta película, por el que estuvo nominada al óscar. Faceta cinematográfica que siempre me ha parecido infravalorada y no se le da la importancia que realmente merece.

Los efectos de sonido hechos en el prestigioso Rancho Skywalker, como siempre a un altísimo nivel, espectaculares en la batalla espacial inicial, el asalto a Kashyyyk y en todos los duelos con sables de luz; que en esta película son unos pocos.

Montaje
Sin ser perfecto es el mejor de esta trilogía, lo cual es algo que me confirma que este episodio es, con diferencia, el que Lucas tenía más perfilado y pensado; no solo a nivel de guion argumental sino a nivel de guion visual. Planos bien situados, todas las secuencias bien estructuradas y con un excelente ritmo, destaca un tercio final de la película muy bien llevado y, pese a que el conflicto final tiene una gran duración, mantiene al espectador en suspense y no decae su epicidad.

Pero como he dicho, no es perfecto y tiene fallos normalmente derivados de recortar secuencias, abundando dichos fallos en los duelos con sable de luz. Ejemplo: en la lucha final Anakin está estrangulando a Obi-Wan sobre una inmensa mesa en las instalaciones separatistas de Mustafar, a su vez aproxima su sable de luz paulatinamente; en esa secuencia empieza teniendo su sable de luz en la mano. cambia el plano y sable pasa a ser el de Obi-Wan, nuevo cambio de plano y vuelve a tener el suyo en la mano. Esto es debido a que el duelo final era mucho más largo y hay un momento en que ambos contendientes intercambian sus sables de luz, esa parte se cortó, pero se ve que al hacer el montaje de la escena recurrieron a secuencias de esa toma cortada, lo cual tienen como efecto que el sable cada vez que cambia el plano cambie también. Obviamente, en medio de una escena con tanta tensión como es un estrangulamiento, poca gente se va a fijar en la empuñadura del sable, pero en mi caso que soy un detallista compulsivo, desde que lo vi en el cine estoy esperando a que, en alguno de los futuros formatos, y ya que esta saga es propensa a los retoques digitales de sus películas a posteriori, lo solucionen.

Conclusión
Este Episodio III es muy bueno, realmente bueno; creo que es de las mejores películas de toda la saga.

No me gusta hacer rankings y anteponer una película sobre otra; como he dicho siempre, para mi Star Wars es un todo, tanto en lo bueno como en lo malo. Pero destacar que es frecuente que esta película este en los puestos de cabeza de la gente que si les gusta valorar un episodio por encima de otro.

Como parte de esta trilogía tan denostada ya sea por moda, por tíos muy aburridos en foros o simple trolleo pues parece que ser así es “cool”; no se le da el suficiente mérito. Una película que contiene algunos de los momentos más significativos y mejor rodados de toda la saga:
  • Todo el primer cuarto de película desde la batalla espacial, el rescate del Canciller, el duelo con Dooku, apoderarse del puente y el aterrizaje de emergencia en Coruscant. Vuelve el espíritu de aventura a Star Wars.
  • Una parte intermedia donde se da el desarrollo de la trama con un excelente ritmo, la desconfianza de los Jedis hacia Palpatine, la seducción de este hacia Anakin aprovechando las malas decisiones del consejo. Las visiones de la muerte de Padme, la conversación en la opera entre Anakin y Palpatine.
  • Pasamos a una batalla terrestre multitudinaria con los clones, que crean acción bélica de fondo atractiva, mientras en primer plano tenemos a un Obi-Wan cabalgando un lagarto inmenso mientras da caza a Grivious, nuevamente esa agradable sensación de aventura y space opera.
  • El arresto de Palpatine, secuencia bien llevada dentro de lo difícil que era de hacer sin hacer a Palpatine totalmente digital, pues el actor no estaba para las exigencias físicas que supone el duelo de sable de luz. Sabia decisión de darle un estilo de lucha similar a Alex Guinness, sin excesos, movimientos cortos y acertados. Por golpear más fuerte el sable de luz no va a cortar más.
  • La orden 66 y el ataque al templo Jedi, emotiva secuencia a nivel musical y visualmente donde vemos morir a muchos personajes entrañables que hemos visto a lo largo de esta trilogía y se han desarrollado en otros medios. Destacando una de las secuencias más crudas de la saga con Vader asesinando a los Padawans, una forma rápida y clara de dejar constancia de su caída en el Lado Oscuro.
  • Todo el último tercio de la película: el ataque de Anakin a Padme dejando claro hasta qué punto a perdido el sentido de lo correcto. Doble duelo de sable de luz intercalados entre sí. Final del duelo entre Anakin y Obi-Wan, el palpable dolor de Obi-Wan en contraste con la palpable furia y odio de Anakin. El nacimiento de Luke, Leia y Vader, colosal toda la secuencia. La separación de los gemelos, Leia en Alderaan, Luke bajo los soles de Tatooine… Joder, muy intenso para resumirlo en un párrafo. Mejor verlo y disfrutarlo. 

Cosas negativas también las hay por supuesto y dependen mucho del espectador, pero yo me voy a centrar en los puntos que consideró más graves:
  • Los droides de la federación de comercio parlantes: este error viene de antaño, del episodio I. Los droides de la federación basan su efectividad en su gran número, pero individualmente son poca amenaza para los héroes y decir eso ya es amable por mi parte. Pero lo que veo absurdo es que puedan hablar, cosa innecesaria en un droide cuya principal función es combatir. Sabiamente y de forma muy coherente suelen limitar esta capacidad en algunas unidades con rango, unidades de seguridad, y unidades que cumplen función de pilotaje o cubran un puesto técnico, por ejemplo de artilleros. Vale que hablen, pero es innecesario buscar que hagan gracias o sean estúpidos. Es Star Wars, el público infantil agradece los personajes caricaturescos, llamativos, patosos, absurdos y raros al hablar, pero el humor con dichos droides está muy mal llevado, no hacen gracia solo dan la impresión de ser unos patanes.
  • La escena de Palpatine contra los Jedis del concejo, queda muy bien en un primer visionado. El salto inicial y como mata a cuatro Jedis en un segundo es una escena pensada para demostrar lo poderoso que es y que en verdad ese anciano canciller de movimientos lentos es un auténtico peligro. Pero es una escena que aguanta muy mal el revisionado, quedando claro que los Jedis, todos ellos maestros del consejo, reaccionan excesivamente lentos y torpes para que un Ian McDiarmid no docto en escenas de acción, con unas piernas enfermas por la edad, pueda aniquilarlos. Las limitaciones del actor no permiten hacer más espectacular la secuencia, pese a su gran disposición, si a la par se quiere mostrar la interpretación de su rostro. Esto se prolonga durante todo el duelo con Mace Windu, cuyo actor también tiene ya sus años. Es una secuencia hecha así a posta para apoyar visualmente al duelo del episodio IV de Obi-Wan, dejando claro que un Jedi o un Sith ya limitados físicamente aunque no sea espectacular su forma de combatir a nivel visual, al ser poderosos en la Fuerza, son igual o más temibles.

viernes, 20 de mayo de 2016

Adversarios variados

Nueva entrega con nuevos adversarios, bastante variados en esta ocasión. Nacidos por las necesidades que imponen las aventuras que escribo o adapto en el momento, que son las que determinan los adversarios que voy desarrollando. Por este motivo lo mismo hay entregas en cortos periodos de tiempo como pueden darse meses entre entregas, pues lo adversarios de uso más común están ya más o menos cubiertos.


Poco más que añadir, se han corregido algunas erratas que he visto y, como el resto de recopilatorios, empieza a tener un volumen considerable.


Los adversarios se ocultan aquí.

sábado, 14 de mayo de 2016

Ya van 7

Mi némesis, mi particular Moriarty... ese archivo que cuando creo que ya está bien siempre aparece una errata o algún fallo de maquetación. 7 versiones ya realizadas, muy por delante del resto de revisiones, pero cuando uno ve que se ha equivocado en el YT-1300 hay que solucionarlo rápido.


Aun así, para que no parezca que es el mismo archivo con 4 cambios, siempre procuro añadir vehículos nuevos, para que la nueva versión merezca la pena todavía más. En este caso 6 vehículos nuevos, algunos muy solicitados como el carguero HWK-290; otros como la moto rueda 48 Roller, son ejemplo de la gran capacidad de recanonización que tiene Star Wars y buscar inspiración en el pasado.


Droids, serie ya olvidada por muchos, añadió y expandió muchas ideas interesantes en el universo Star Wars. En dicha serie fue la primera vez que vi una moto rueda (wheel byke). A la derecha el modelo que usa Griveous en el Episodio III, que introduce dicho tipo de vehículo dentro del canon actual.
La moto rueda y lo demás aquí.